Se inició la misa a las 19,30 h. con el canto del coro “Ven Señor no tardes”. Don José Antonio recuerda que durante la Eucaristía se procederá a la bendición de los Jesusitos que presidirán los belenes de nuestros hogares. La presencia de esa pequeña figura bendecida nos va a recordar a todos que la bendición de Dios está presente en nuestras familias y nos acompaña en el transcurso de la vida.
A continuación, cercana ya la Natividad del Señor, se encienden los cuatro cirios de la corona de Adviento. Mientras el coro canta Maranhata.
Las lecturas, leídas por tres miembros del grupo Arcoiris, nos recuerdan cómo en el Antiguo Testamento, Dios por medio de Isaías (7,10-14), anunciaba ya la concepción de una virgen que daría a luz un hijo al que le pondría por nombre Enmanuel. El Salmo (23, 1-6) nos recuerda también la venida del Señor, el Rey de la Gloria. Por su parte San Pablo, en la segunda lectura, insiste en que los profetas en las Escrituras, ya refiere el nacimiento del hijo de Dios, nacido de la estirpe de David.
El Evangelio, según San Mateo (1, 18-24), nos recuerda la generación de Jesucristo, cómo fue la Anunciación y la aparición en sueños a José explicándole cómo debía acoger a su mujer que estaba encinta de una criatura venida del Espíritu Santo al qué nombre debía ponerle por nombre Jesús.
En la homilía, Don José Antonio centra el tema del Evangelio, con una pregunta, ¿Qué es lo que vamos a celebrar? y nos da la respuesta, lo que nos une, lo nos hace vibrar de alegría y de júbilo. ¿Qué es la Natividad del Señor?. Cuando vemos a estos niños, aquí sentados y a nuestros jóvenes aquí presentes, nos damos cuenta de que no hemos sabido transmitirles bien las cosas, con la fuerza y vigor que deberíamos haberlo hecho. El Evangelio de hoy nos cuenta el hermoso relato que leemos todos los años en la fiesta de San José. Un relato que llama a la reflexión.
En este punto Don José Antonio interpela a uno de los niños sobre, si cuando llega la noche, se pregunta si lo que ha hecho, está bien o está mal. El niño que en un principio afirma con seguridad que sí, duda ante la insistencia de Don José Antonio que pone en duda su primera respuesta, terminando por afirmar que lo hace sólo a veces. Don José Antonio, afirma que los mayores tampoco lo hacen, pero que en el caso de que lo hagan y queden satisfechos de lo que han hecho, se deberían preguntar si lo que hicimos, lo podíamos hacer mejor. Esa es la pregunta que hoy aparece en el evangelio. Si los mayores no nos cuestionamos esto, es impensable que lo hagan los niños a quienes no se lo hemos enseñado.
Santa Teresa, además de los votos de castidad, pobreza y obediencia, hizo un cuarto voto. El de aspirar a la perfección. Nosotros debemos aspirar a no dejar de hacer el bien, a no omitir el bien que podíamos haber hecho, no sólo a no hacer el mal.
San José es calificado en el Evangelio, como un hombre justo, con una justicia no humana, sino la justicia de Dios. Si San José hubiera repudiado a María, está hubiera sido apedreada porque así lo mandaba la ley de Moisés. Si la hubiera repudiado hubiera actuado correctamente según la ley de Moisés, sin embargo, no lo hizo. Decide repudiarla en secreto para evitar ese daño mayor, porque busca el bien. Pero después de la aparición del Ángel en sueños, San José iluminado por el Señor y sintiendo todo su apoyo, decide no sólo no repudiarla, sino acogerla, haciendo no sólo el bien, sino lo mejor.
Pide que tengamos en cuenta esta actitud en las reuniones familiares que se avecinan para no hacer el más mínimo comentario de aquellos que nos caen mal o no tan bien, hagámoslo para que los niños no sigan luego nuestros pasos. Aprendamos de José. Hagamos no sólo lo bueno, sino lo mejor. Y sobre todo cuestionémonos de vez en cuando si el día que hemos vivido, lo hubiéramos podido hacer mejor. No somos marionetas en manos de Dios, el nos ha creado libres, pero para que actuemos con responsabilidad. Cuando uno opta por el bien, Dios le acompaña y le ilumina como hemos visto en San José para que obre lo mejor. Que él no sea una mera figura decorativa en el Belén, sino como lo tengamos como el gran hombre que nos enseña a obrar, no el bien, sino lo mejor.
A continuación se pide por la Iglesia, por todos los cristianos, por los gobernantes de nuestro país y del mundo entero, por los pobres y los que pasaran estas fiestas en soledad, por nosotros y nuestras familias y amigos, por todos nuestras hermanos difuntos, para que en estas fiestas de Navidad sepamos hacer presentes al Señor en nuestros hogares y familias.
Después procede a la bendición de los niños Jesús, con la ilusión en especial de todos los niños que muestran en sus manos a los niños Jesús que presiden los belenes de sus hogares, levantándonos en alto para que les llegue el agua bendita purificadora.
Prosigue la liturgia Eucarística.
Finalizando la Eucaristía, el celebrante recuerda que el 28 y 29 de Diciembre estará expuesto el mercadillo solidario y en ese domingo se celebrará el día de la Sagrada Familia.
Recuerda que a continuación tendrá lugar el Festival de Navidad y después la cena comunitaria en la que todos compartiremos lo que hayamos traído, e invita a todos a que prosiga la fiesta, permaneciendo en el templo.
Con la bendición termina la Eucaristía
Festival de Navidad
Nada más terminada la misa y con el breve intervalo necesario para vestir el escenario ya montado sobre el que van a tener lugar las actuaciones de los diversos grupos y colectivos de la parroquia, empieza el festival.
Presentado por un joven y una joven del grupo Arcoiris, desfilan uno tras otros los grupos que han preparado actuaciones para esta ocasión.
Debutan los niños que se preparan para tomar la primera comunión acompañados de sus catequistas que cantaron varios villancicos a la vez que siguen la coreografía que han preparado, que hacen las delicias de los presentes.
Acto seguido debutan en el escenario los más pequeños del Grupo Arcoiris que nos deleitan con varios villancicos acompañados de bailes que sacan las sonrisas de todos los que allí estábamos.
A continuación merecen mención especial los niños de de 4º a 6º de primaria del grupo Arcoiris que realizan una representación navideña en la que pone de manifiesto, que lo principal de estas fechas, no son la comida, la bebida, los regalos, … sino el nacimiento del niño Dios que se nos manifiesta con su presencia.
También el grupo de confirmación actúa con una representación del nacimiento en el que todos adoran al niño Dios a través de un espectáculo de sombras chinescas poniendo de manifiesto los diversos momentos de la vida de Jesús. en una de las actuaciones más emotivas de la noche.
Todo ello amenizado por los dos magníficos presentadores, y el resto de monitores del grupo, que se encargaron de animar a los presentes, bien desde el escenario o desde los mismos bancos, planteándoles retos y haciendo participar a todos en la fiesta.
Un jurado graciosamente caracterizado iba dando puntos a los asistentes situados a un lado o a otro de la Iglesia, según la fidelidad de su actuación al reto planteado por los presentadores, que solían ser la continuación del canto de conocidos villancicos con modificaciones que hacían que todo fuera mucho más alegre y divertido.
El festival terminó con el empate de ambos grupos de asistentes, después de jugárselo todo, un miembro de cada lado, a “piedra, papel o tijera” y recibir el voto del jurado en ese sentido. Un voto que dejó a todos satisfechos más que por el resultado, por el buen sabor de boca y la experiencia de la que todos disfrutamos.
Con ello se dio paso a la cena de confraternización en el local parroquial.
Nota: Algunos de los presentes, no pudimos durante las representaciones de los chicos, sustraernos al recuerdo de nuestro querido PEDRO, al que sentimos presente con nosotros en ese momento. Un Pedro, que con tanto gusto y dedicación dirigió la preparación y puesta en escena de este festival durante tantos años. Y que ahora ha quedado en manos de un gran grupo y todos los monitores que han sabido tomar de sus manos la alternativa.
¡¡UN DIEZ POR PARTE DEL EQUIPO WEB A TODOS LOS QUE PARTICIPARON EN LA ORGANIZACIÓN O DESARROLLO DEL FESTIVAL, QUE ALCANZÓ COTAS MUY ALTAS DE CALIDAD Y DE ALEGRÍA QUE ES DE LO QUE SE TRATABA!!
COMO CANTÁIS VOSOTROS: BRAVO, BRAVO, BRAVO, BRAVÍSIMO…”