LA CELEBRACIÓN TUVO LUGAR EL DOMINGO 6 DE JUNIO EN LA MISA DE 12,3O H. QUE FUE CELEBRADA POR DON JOSE ANTONIO Y CANTADA POR EL CORO PARROQUIAL. FUE ASISTIDO POR NUESTRO SEMINARISTA JERÓNIMO Y LOS ACÓLITOS DEL ALTAR.

AL INICIO DE LA MISA DON JOSÉ ANTONIO RECUERDA QUE HOY CELEBRAMOS EN COMUNIÓN CON TODA LA IGLESIA UNIVERSAL LA GRAN SOLEMNIDAD DEL CUERPO Y LA SANGRE DE CRISTO. JESÚS SE HACE PRESENTE EN MEDIO DE NOSOTROS PARA REPETIR AQUEL GESTO QUE ÉL NOS DEJÓ LA NOCHE ANTES DE SU ENTREGA. EN EL PAN Y EN EL VINO DE LA EUCARISTÍA, ÉL SE NOS DA COMO ALIMENTO PARA QUE VIVAMOS SIEMPRE UNIDOS A ÉL Y APRENDAMOS A AMAR COMO EL NOS HA AMADO. POR ESO HOY ES TAMBIÉN EL DÍA NACIONAL DE CÁRITAS, PORQUE EL AMOR DE CRISTO PARA CON NOSOTROS DEBEMOS CELEBRARLO CON LOS MÁS POBRES Y NECESITADOS.

PRIMERA LECTURA LEÍDA POR JOSÉ LUIS

Lectura del libro del Éxodo 24, 3-8

SALMO RESPONSOSRIAL CANTADO POR JAVIER

Salmo 115,12-13. 15 y 16bc. 17-18 (R.:13)

SEGUNDA LECTURA LEÍDA POR ASCENSIÓN

Lectura de la carta a los Hebreos 9, 11-15

Después del Aleluya, cantada por el coro parroquial, y antes del Evangelio, Don José Antonio leyó “Lauda, Sion” un himno de Alabanza al Señor. Por su belleza se reproduce integro aquí:

Secuencia “Lauda, Sion”:

Alaba, alma mía, a tu Salvador;

alaba a tu guía y pastor
con himnos y cánticos.

Pregona su gloria cuanto puedas,
porque él está sobre toda alabanza,
y jamás podrás alabarle lo bastante.

El tema especial de nuestros loores
es hoy el pan vivo
y que da vida.

El cual se dio en la mesa de la sagrada cena
al grupo de los doce apóstoles
sin género de duda.

Sea, pues, llena, sea sonora,
sea alegre, sea pura
la alabanza de nuestra alma.

Pues celebramos el solemne día
en que fue instituido
este divino banquete.

En esta mesa del nuevo rey,
la pascua nueva de la nueva ley
pone fin a la pascua antigua.

Lo viejo cede ante lo nuevo,
la sombra ante la realidad,
y la luz ahuyenta la noche.

Lo que Jesucristo hizo en la cena,
mandó que se haga
en memoria suya.

Instruidos con sus santos mandatos,
consagramos el pan y el vino,
en sacrificio de salvación.

Es dogma que se da a los cristianos,
que el pan se convierte en carne,
y el vino en sangre.

Lo que no comprendes y no ves,
una fe viva lo atestigua,
fuera de todo el orden de la naturaleza.

Bajo diversas especies,
que son accidentes y no sustancia,
están ocultos los dones más preciados.

Su carne es alimento y su sangre bebida;
mas Cristo está todo entero
bajo cada especie.

Quien lo recibe no lo rompe,
no 1o quebranta ni lo desmembra;
recíbese todo entero.

Recíbelo uno, recíbenlo mil;
y aquél lo toma tanto como éstos,
pues no se consume al ser tomado.

Recíbenlo buenos y malos;
mas, con suerte desigual
de vida o de muerte.

Es muerte para los malos,
y vida para los buenos;
mira cómo un mismo alimento
produce efectos tan diversos.

Cuando se divida el Sacramento.
no vaciles, sino recuerda
que Jesucristo tan entero
está en cada parte como antes en el todo.

No se parte la sustancia,
se rompe sólo la señal;
ni el ser ni el tamaño
se reducen de Cristo presente.

He aquí el pan de los ángeles,
hecho viático nuestro;
verdadero pan de los hijos,
no lo echemos a los perros.

Figuras lo representaron:
Isaac fue sacrificado;
el cordero pascual, inmolado;
el maná nutrió a nuestros padres.

Buen pastor, pan verdadero,
¡oh Jesús!, ten piedad.
Apaciéntanos y protégenos;
haz que veamos los bienes
en la tierra de los vivientes.

Tú, que todo lo sabes y puedes,
que nos apacientas aquí siendo aún mortales,
haznos allí tus comensales,
coherederos y compañeros
de los santos ciudadanos.

EVANGELIO PROCLAMADO POR DON JOSÉ ANTONIO

Evangelio según San Marcos 14, 12-16, 22-26

 A CONTINUACIÓN DON JOSÉ ANTONIO PRONUNCIÓ LA HOMILÍA QUE SE PUEDE ESCUCHAR  MÁS ABAJO. PINCHANDO AQUÍ, PUEDE SER DESCARGADA.

LAS PETICIONES SON ELEVADAS AL SEÑOR POR JERÓNIMO

PROSIGUE LA LITURGIA DE LA EUCARISTÍA

AL FINALIZAR LA MISA TIENE LUGAR LA EXPOSICIÓN Y ADORACIÓN DEL SANTÍSIMO.